Miriam y Esta - para sorpresa de todos - mostraron orgullosas una regular palada de nieve , cuidadosamente arropada en hojas de helecho . A preguntas de la concurrencia aclararon que procedía de la casa del jefe del del consejo . Jacobo y Santiago , alarmados ante la insólita generosidad de Ismael , exigieron detalles . Pero , ocupadas en cumplir mis indicaciones , dieron la espalda a sus respectivos maridos , aplazando la inquietante cuestión . Cuando los lienzos rezumaron una aceptable frialdad fui aplicándolos a la rodilla de la Señora , que no tardó en experimentar el esperado alivio . El frío , además de calmar el dolor , provocó una vasocontricción , disminiyendo así la extravasación sanguínea y el edema . La operación , sencilla en extremo , iría repitiéndose regularmente hasta la total extinción de la nieve . Y el dormido optimismo de María despertó con brusquedad . Con un delicioso ímpetu ... En un descuido , mientras asistía complacido al rápido aprendizaje del cambio de compresas por parte de Miriam ,la espontanea Señora fue a estampar un sonoro beso en la mejilla de este explorador . El cariñoso gesto terminaría propagándose en forma de risas y aplausos .
Hacia las 18 horas y 22 minutos , con la caida del sol , Ruth me condujo hasta el perol que bullía en el hogar . Lo aparté y , tras unos minitos en reposo , le mostré cómo empapar los lienzos en la pócima , alternándolos con las compresas de nieve . La infusión de caléndula , muy apropiada para golpes y contusiones , completó mi modestisima aportación , remediando en parte lo que - a buen seguro - no hubiera demorado en sanar por si mismo .
Los hombres , impacientes , siguieron presionando . Y Miriam pasó a exponer la parca historia del << hielo >> . El responsable de la entrega había sido el criado que ya les había informado en dos ocasiones y secretamente . Pero Jacobo y Santiago no terminaban de ver claro . << ¿ Y el saduceo ? >>
Todo tenía su explicación . Al parecer - ésas fueron las palabras del << espía >> de la familia -, Ismael se hallaba ausente desde primeras horas de la mañana . Por alguna razón desconocida había partido hacia Séforis y con notorias prisas .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
Hacia las 18 horas y 22 minutos , con la caida del sol , Ruth me condujo hasta el perol que bullía en el hogar . Lo aparté y , tras unos minitos en reposo , le mostré cómo empapar los lienzos en la pócima , alternándolos con las compresas de nieve . La infusión de caléndula , muy apropiada para golpes y contusiones , completó mi modestisima aportación , remediando en parte lo que - a buen seguro - no hubiera demorado en sanar por si mismo .
Los hombres , impacientes , siguieron presionando . Y Miriam pasó a exponer la parca historia del << hielo >> . El responsable de la entrega había sido el criado que ya les había informado en dos ocasiones y secretamente . Pero Jacobo y Santiago no terminaban de ver claro . << ¿ Y el saduceo ? >>
Todo tenía su explicación . Al parecer - ésas fueron las palabras del << espía >> de la familia -, Ismael se hallaba ausente desde primeras horas de la mañana . Por alguna razón desconocida había partido hacia Séforis y con notorias prisas .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto