La confesión de Procla , en opinión de quien esto escribe , vino a confirmar dos puntos ya contemplados .
Primero : el escaso juicio crítico de Poncio hacia sí mismo . Un síntoma más de su problema mental . Entre los enfermos maniacodepresivos , esta actitud contrastada con su demoledora capacidad para juzgar a los demas . El trasvase de responsabilidades - << lavándose las manos >> - es peculiar de estos psicóparas . Su habilidad en este campo llega al extremo de conseguir que los que le rodean se sientan responsables del los actos del propio demente .
Segundo : el rechazo de la procuratio o compensación a los dioses ponía de manifiesto el nulo sentido de culpabilidad en la condena del Maestro . Este << vacío >> ético , como ya expliqué , sólo podía obedecer a una situación de crisis psíquica . No era de extrañar , por tanto , que olvidara pronto aquella ejecución .
Y vuelvo a lamentarme . Me quejo , sí , de que estos pequeños -grandes sucesos no hayan trascendido , deformando la realidad . Y una sofocante duda me inquieta desde hace tiempo . Si los evangelñistas conocían el trastorno del gobernador , ¿ por qué lo ocultaron ? ¿ Empañaba la imagen del Maestro ? ¿ No convenia decir que Jesús de Nazaret fue juzgado (?) por un loco ?
Como afirmaba el Galileo , << quien tenga oídos ... >>
- Y cuando al fin venció el miedo y se decidió a abandonar el lecho - prosiguió la mujer con un rictus de desprecio ., el muy cínico me notificó que , además de rechazar el portento del sol..., omen accipio!
E impotente , refugió la mirada en la rumorosa cascada .
Estaba claro : Poncio , como todo maniacodepresivo , experimentaba una preocupante fuga de ideas .
Aquel omenaccipio - << tomo a buen agüero - era un signo más de su demencia .
Amén de refutar o repudiar la sagrada cólera del gran Júpiter y trasladar la culpa a los judíos , cambió de táctica , valorando el prodigio solar como un << buen presagio >>.
Y Claudia , saliendo de sus oscuras reflexiones , añadió :
- Mis reproches no fueron oídos . Y durante días aquel maldito omen accipio fue su cantinela favorita .
Procla cubrayó la muletilla en un tono de censura :
- Y lo peor es que está convencido . Cree firmemente que nuestra suerte ha cambiado.
Guardé silencio . En eso acertó , Lo que Poncio no podía imaginar era la << dirección >> tomada por dicha suerte .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
Primero : el escaso juicio crítico de Poncio hacia sí mismo . Un síntoma más de su problema mental . Entre los enfermos maniacodepresivos , esta actitud contrastada con su demoledora capacidad para juzgar a los demas . El trasvase de responsabilidades - << lavándose las manos >> - es peculiar de estos psicóparas . Su habilidad en este campo llega al extremo de conseguir que los que le rodean se sientan responsables del los actos del propio demente .
Segundo : el rechazo de la procuratio o compensación a los dioses ponía de manifiesto el nulo sentido de culpabilidad en la condena del Maestro . Este << vacío >> ético , como ya expliqué , sólo podía obedecer a una situación de crisis psíquica . No era de extrañar , por tanto , que olvidara pronto aquella ejecución .
Y vuelvo a lamentarme . Me quejo , sí , de que estos pequeños -grandes sucesos no hayan trascendido , deformando la realidad . Y una sofocante duda me inquieta desde hace tiempo . Si los evangelñistas conocían el trastorno del gobernador , ¿ por qué lo ocultaron ? ¿ Empañaba la imagen del Maestro ? ¿ No convenia decir que Jesús de Nazaret fue juzgado (?) por un loco ?
Como afirmaba el Galileo , << quien tenga oídos ... >>
- Y cuando al fin venció el miedo y se decidió a abandonar el lecho - prosiguió la mujer con un rictus de desprecio ., el muy cínico me notificó que , además de rechazar el portento del sol..., omen accipio!
E impotente , refugió la mirada en la rumorosa cascada .
Estaba claro : Poncio , como todo maniacodepresivo , experimentaba una preocupante fuga de ideas .
Aquel omenaccipio - << tomo a buen agüero - era un signo más de su demencia .
Amén de refutar o repudiar la sagrada cólera del gran Júpiter y trasladar la culpa a los judíos , cambió de táctica , valorando el prodigio solar como un << buen presagio >>.
Y Claudia , saliendo de sus oscuras reflexiones , añadió :
- Mis reproches no fueron oídos . Y durante días aquel maldito omen accipio fue su cantinela favorita .
Procla cubrayó la muletilla en un tono de censura :
- Y lo peor es que está convencido . Cree firmemente que nuestra suerte ha cambiado.
Guardé silencio . En eso acertó , Lo que Poncio no podía imaginar era la << dirección >> tomada por dicha suerte .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto