jueves, 19 de marzo de 2015

Caballo de Troya - El Diario del Mayor - Tomo 1 - 2 de abril , domingo ( 22 )

Jesús , sin poder disimular su tristeza , comentó entre sus discípulos : << Ahora mi alma está turbada ... ¿ Qué diré ? Padre , ¡ líbrame de esta ahora ! .....>>
Sin embargo , el Cristo pareció arrepentirse al momento de aquellos pensamientos en voz alta y añadió , de forma que todos sus seguidores pudieran oírle :
- Pero para esto he venido a esta ahora ....
Y levantando su rostro hacia el encapotado cielo de Jerusalén , gritó :
- ¡ Padre , glorifica tu nombre  !
Lo que aconteció inmediatamente es algo que no sabría explicar con exactitud . Nada más pronunciar aquellas desgarradoras palabras , en la base - o en el interior  - de los cumulonimbus que cubrian la ciudad ( y cuya altura media , según me confirmó Eliseo , era de unos seis mil pies ) se produjo una especie de relámpago o fogonazo . De no haber sido por la potente y metálica voz que se dejó oír a continuación , yo lo habría atribuido a una posible chispa eléctrica , tan comunes en este tipo de nubes tormentosas  . Pero , como digo , casi al anísono de aquel fogonazo , los cientos de personas que permanecíamos en la gran explanada pudimos escuchar una voz que , en arameo , decía :
- Ya he glorificado y glorificaré de nuevo .
La multitud , los discípulos y yo mismo quedamos sobrecogidos . Al fin la gente comenzó a reaccionar y la mayoría trató de tranquilizarse  , asegurando que aquello sólo había sido un trueno . Pero todos , en el fondo de nuestros corazones , sabíamos que un trueno no habla ......
Los hebreos volvieron a agolparse en torno al Maestro y éste les anunció :
- Esta voz ha venido , no por mí , sino por vosotros .
Ahora es el juicio de este mundo : ahora va a ser expulsado el príncipe de este mundo . Y yo , levantado de la tierra , atraeré a todos los hombres hacia mí .....
Pero , tal y como me temía  , aquella turba no entendió una sola palabra . Los propios discípulos se miraban entre sí , como diciendo : << ¿ de qué está hablando ? >>
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez

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