Al hablar de un ataque de << locura >> , el jeque no había exagerado . Al igual que el ser humano , el camello y el dromedario padecen también de podraga o gota , que afecta a las extremidades , provocando en los cuadrúpedos un dolor intensísimo . Cuando esto sucede , el animal << enloquece >> , mostrándose irascible y peligroso en extremo . Esto , ni más ni menos , era ocurrido en el seno de la caravana . Quizá , si el incidentelo hubiera protagonizado un macho. Murashu ordenado su inmediato sacrificio . Al tratarse de una hembra , el comportamiento de los nómadas era radicalmente distinto . La leche de la dromedaria , de alto contenido proteico y un excelente porcentaje salino , constituía un alimentom y una bebida básicos en la dieta de aquellas gentes . Y con buen criterio , procuraban aliviar la << locura >> del rumiante , proporcionándole abundante líquido y las negras semillas contenidas en las cápsulas esféricas. Estos granos aceitosos no eran otra cosa que el ovario madurado de la adormidera , una planta sobradamente conocida en las regiones meopotámicas , que contiene hasta veinticinco alcaloides opiáceos . Como analgésicoy calmante del dolor resultaba de gran utilidad en estas circunstancias . A este << tratamiento >> , los nómadas , antiguos conocedores de las propiedades medicinales de las plantas ( los asirios , por citar un ejemplo , disponian de más de doscientas cincuenta especies en su << farmacopea >>) , añadían las raíces secundarias del << harpagofito >> , especialmente indicado para el dolor en las articulaciones .
Nuestro anfitrión y mis acompañantes comenzaron a impacientarse . No terminaban de entender mi interes por la dromedaria . A decir verdad , aunque me hubieran interrogado , tampoco había sido fácil satisfacer su curiosidad . Encorvado sobre las inflamadas extremidades del animal , mi examen no encerraba otro ogjetivo que el de intentar averiguar el grado de contaminación por heces . Si el rumiante había pateado a la mujer convenía cercionarse del estado de las pezuñas . << Aun así - cavilé -, sise registra la aparición de un tétano , ¿ Qué hacer ? >>
Fue María la que tomó la iniciativa . Y situandose a mi espalda , posó su mano sobre mi hombro , reprendiéndome con dulzura y calificando mi acción de << imperdenable despiste >> .
- Jasón - me advirtió sonriente -, te equivocas . No es el dromedario el que precisa de tu ciencia .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
Nuestro anfitrión y mis acompañantes comenzaron a impacientarse . No terminaban de entender mi interes por la dromedaria . A decir verdad , aunque me hubieran interrogado , tampoco había sido fácil satisfacer su curiosidad . Encorvado sobre las inflamadas extremidades del animal , mi examen no encerraba otro ogjetivo que el de intentar averiguar el grado de contaminación por heces . Si el rumiante había pateado a la mujer convenía cercionarse del estado de las pezuñas . << Aun así - cavilé -, sise registra la aparición de un tétano , ¿ Qué hacer ? >>
Fue María la que tomó la iniciativa . Y situandose a mi espalda , posó su mano sobre mi hombro , reprendiéndome con dulzura y calificando mi acción de << imperdenable despiste >> .
- Jasón - me advirtió sonriente -, te equivocas . No es el dromedario el que precisa de tu ciencia .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto