sábado, 16 de enero de 2016

Caballo de Troya - El Diario del Mayor - Tomo 4 - El Diario - 25 de abril , martes , ( 26 )

Recordando la eficacia del joven Juan Marcos Ciudad Santa , a punto estuve de solicitar el auxilio , como guía , de algunos de los molzabetes . Pero , no deseando despertar tempranos contratiempos elegí caminar en solitario .
Aquella esquina de Nazaret - en el enclave más prósimo a los caminos  - venia a ser , forzando la imagen , en centro industrial del poblado . Abriéndose en V y escalando la ladera  se alineaban entre ocho o diez talleres  , habilitados en casas de piedra  de una sola planta  y encalados con peor gusto que el resto de la aldea . De muy distintas dimensiones aparecían - según la costumbre - con las puertas de par en par . Y bien en el umbral , sentados al tibio sol de la mañana  , o confundidos  en la penumbra del interior  , carpinteros  , tejedores  , toneleros , y entintadores  se afanaban en sus menesteres  , canturreando los unos , en silencio la mayoría  o en interminables  parloteos los otros  . Sobre la desnuda tierra , al pie de los muros  o colgados de las fachadas , se exhibían al público las piezas ya terminadas : mesas, bancos , camas , y arcones de todos los calibres , formas y precios  ; yugos primorosamente curvados y equilibrados  ; lanzas de tiro y ruedas para los carruajes  ; aguijones y mangos de arados  ; puertas y marcos para ventanas  ; huchas y artesas para las amas de casa  ; archivadores para los escribas ; sólidas vigas destinadas a la sujeción de las terrazas que coronaban las viviendas y los propios talleres  y almacenes ; túnicas y mantos de vivos colores  , en lana y lino , chorreando aúnel azul , el escarlata  o el verde de los tintes  ; camisas  de niño delicadamente tejidas ; bolsas de cuero  ; cestas de mimbre  , alfombras y esteras trenzadas en espiral ; toneles de diferentes bocas y cubas embreadas para el transporte  y almacenamiento de vino y frutos  y , en fin , una interminable secuencia  de platos  , escudillas , cucharas y recpientes de madera.
La excepción entre los artesanos  , siempre varones , la constituian los operarios de los telares . Todos eran mujeres  . Las jóvenes , sentadas en el suelo , estiraban la lana  , extrayéndola  de grandes cestos circulares de mimbre . Otras , igualmente jóvenes  , hilaban en pie , valiéndose de ruecas y husos . Sólo las ancianas tenian a su cargo la compremetida labor de tejer los primitivos telares verticales .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez


No hay comentarios:

Publicar un comentario

puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto