sábado, 12 de marzo de 2016

Caballo de Troya - El Diario del Mayor - Tomo 4 - El Diario , 26 de abril , miércoles ( 69 )

El Hijo de Dios , en cuanto hombre , por supuesto que fue tentado . Pero desde mi corto conocimiento , con maniobras y proposiciones más sibilinas y - valga la redundancia - tentadoras . A lo largo de su vida terrenaltuvo que elegei. ¿ Esiste una fórmula más diabólica de tentación ? Le fue ofrecida una << carrera >> : una educación refinada en las escuelas rabínicas de la Ciudad santa . Pudo cubrirse de la dudosa gloria humana  , participando en el movimiento zelota . Le fue dada la atractiva posibilidad de salir de la pobreza contrayendo matrimonio con Rebeca . El siguiente << canto de sirena >>- más peligroso que los anteriores  - fue entonado por la cultura  . Para ser exacto , por el señuelo de la enseñanza .
A su paso por Filadelfia , el Maestro Y Simón conocieron a un próspero y noble mercader de Damasco , dueño de cuatro mil camallos  y ágil negociante , con intereses  y mejores dineros  repartidos por todo el imperio . SE dirigía a Roma y , al ingresar en Jerusalén , tuvo a bien invitar a Jesus a su casa . La notable instrucción y los dilatados saberes  de aquel impenitente viajero cautivaron al Hijo del Hombre . A su vez , el oriental recibió una fuerte impresión . Aquél galileo de veintidós años  destilaba << algo >> especial ... Y cuando Jesús  se despedía  , rumbo a Betania , el banquero le ofreció un puesto en sus negocios de importación  . Debería acompañarle a Damasco y , posteriormente  , por el resto del mundo conocido . El Nazareno rechazó la oferta  , escudándose en su familia . Pero el mercader tampoco era hombre que se rindiera con facilidad . Y algún tiempo despues volvería a la carga , con una << tentación >> de diferente corte .
Simón entró en la legalidad judía  y , por espacio de una semana , él y su Hermano disfrutaron de la libertad . Jerusalén , en plana fiesta , era un torbellino de lenguas , colores y costumbres . Y el curioso Jesús  se dejó llevar por aquel oleaje  , participando en decenas de cónclaves  . En uno de esos encuenros  con gentiles y peregrinos fue a tropezar con un griego que hacía su primer viaje a la Ciudad Santa  . Era martes de Pascua . Lugar ; el espléndido palacio de los Asmoneos . Pues bien , el griego en cuestión - que recibia el nombre de Esteban - quedó conmocionado ante el estilo y las ideas de Jesús . Y durante cuatro horas polemizaron sobre lo humano y lo divino .
Autor : J.J.Benitez
Un abrazo
Antonio Martinez

No hay comentarios:

Publicar un comentario

puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto