Fue entonces cuando , descubrí algo que puso de manifiesto la identidad de los que me precedián . Sujeta al ceñidor y colgando en el costado derecho aparecía una de las temidas porras claveteadas , de uso común entre los los policías betusianos del Templo . Con seguridad , debían de hallarse apostados en las inmediaciones de la casa de Elías Marcos , pendientes de los movimientos de los << desarrapados galileos >> , como calificaban a los íntimos del Maestro . En el fondo , era lógico . la casta sacerdotal no descansaría hasta aniquilar el blasfemo e incómodo movimiento que había encabezado el rabí . Aquellos discípulos eran todavía una amenaza , y lo más probable es que Caifas hubiera impartido severas órdenes a los levitas y confidentes . Pero ¿ cuáles eran sus intenciones ? ¿ Se trataba de simples espías , encargados de vigilar e informar ?
Cubiertos los tres o cuatro primeros estadios - de los quince ( 2775 metros ) que nos separaban de Betania -, el camino alcanzó su cota máxima ( 680 metros ) , girando a la izquierda , en dirección nordeste . Desde aquel punto , bordeando siempre la falda sur del monte de las Aceitunas , se precipitaba suavemente hacia Betfagé , en una recta de casi medio kilómetro . Al conquistar el repecho me detuve . A mi espalda retumbó el doble tañido de bronce de las trompetas del Temlo , anunciando la salida del sol . Los levitas no tardarían en abrir la puerta de doble hoja , tembien llamada de Nicanor , autorizando así la entrada en el atrio de los Gentiles . Al fondo del sendero , a cosa de trecientos metros , apareció ante mi el apretado grupo de los galileos . Caminaban raudos . Al parecer , no se habían percatado de la proximidad de los esbirros . Éstos , al distinguir su objetivo , aceleraron la marcha . Un lejano y solitario toque de trompeta , recordando la primera oración del día , sirvió de detonante . Quedé paralizado . El griterío de los fanáticos llegó hasta el grupo de cabeza . Y los discípulos , tan atónitos como yo , se revolvieron , contemplando la carga . ¿ Qué podía hacer ? Obviamente , mucho . Hubiera sido suficiente con activar el sistema ultrasónico de la << vara de Moisés , para dejar inconscientes a la mayoría . Y ciego de ira salí tras ellos , dispuesto a inutilizarlos . A mitad de camino cesé en mi alocada carrera . estaba a punto de violar la más estricta y sagrada de las normas de la operación .
No, ése no era mi papel.
Autor : J.J.benitez
Un abrazo
Antonio Matinez
Cubiertos los tres o cuatro primeros estadios - de los quince ( 2775 metros ) que nos separaban de Betania -, el camino alcanzó su cota máxima ( 680 metros ) , girando a la izquierda , en dirección nordeste . Desde aquel punto , bordeando siempre la falda sur del monte de las Aceitunas , se precipitaba suavemente hacia Betfagé , en una recta de casi medio kilómetro . Al conquistar el repecho me detuve . A mi espalda retumbó el doble tañido de bronce de las trompetas del Temlo , anunciando la salida del sol . Los levitas no tardarían en abrir la puerta de doble hoja , tembien llamada de Nicanor , autorizando así la entrada en el atrio de los Gentiles . Al fondo del sendero , a cosa de trecientos metros , apareció ante mi el apretado grupo de los galileos . Caminaban raudos . Al parecer , no se habían percatado de la proximidad de los esbirros . Éstos , al distinguir su objetivo , aceleraron la marcha . Un lejano y solitario toque de trompeta , recordando la primera oración del día , sirvió de detonante . Quedé paralizado . El griterío de los fanáticos llegó hasta el grupo de cabeza . Y los discípulos , tan atónitos como yo , se revolvieron , contemplando la carga . ¿ Qué podía hacer ? Obviamente , mucho . Hubiera sido suficiente con activar el sistema ultrasónico de la << vara de Moisés , para dejar inconscientes a la mayoría . Y ciego de ira salí tras ellos , dispuesto a inutilizarlos . A mitad de camino cesé en mi alocada carrera . estaba a punto de violar la más estricta y sagrada de las normas de la operación .
No, ése no era mi papel.
Autor : J.J.benitez
Un abrazo
Antonio Matinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto