La situación no podía ser más crítica . El robo del contenido de la mencionada bolsa nos dejó sin dinero . Los ciento treinta y un denario de plata eran la última reserva.
Ciertamente , los responsables de la Operación nos entregaron una suma que respondía a las necesidades de los cuarenta o cuarentay cinco días de que constaba aquel segundo << salto >> en el tiempo . Lo que nadie contempló fue la posibilidad de que estos expedicionarios fueran asaltados y robados .
La cuestión es que , con esta lamentable pérdida , las cosas se habían precipitado . Y nos hallábamos ante otro esquinado conflicto : ¿ Cómo cumplir el resto de la fase << oficial >>?
9.30 horas .
Abstraído por estos pensamientos , pasé de largo ante el primero de los desvíos ; el que conducía a la pequeña aldea de Tir´an . Algunos lugareños , generalmente mujeres con su prole , ofrecían a voces los productos de la tierra . Y forcé la marcha . Aquellos dos kilómetros y medio fueron rematados en algo menos de treinta minutos .
A derecha e izquierda , partidas de felah rompían el dorado y ondeante horizonte , a la espera del secado de las manchas de cebada .La siega , en pleno apogeo , reunía en los campos a decenas de familias que se animaban con monótonos cánticos . Y entre carretas y asnos , una chiquillería alegre e indomable corría sin cesar arriba y abajo , espantando con gritos y palmoteos las tenaces nubes de currucas y tórtolas .
¿ La fase << oficial >> ?
A decir verdad era lo que menos me preocupaba . Mi obsesión en aquellos momentos se centraba en el tercer << salto >> . Aquél sí constituía un gravísimo problema . ¿ Cómo emprender semejante aventura sin un mísero as ?
Eliseo y quien esto escribe ya lo habíamos discutido . Y estábamos de acuerdo : el seguimiento continuado de la vida pública del Maestro - estimada en cuatro años - nos obligaba a contar , entre otros importantes elementos con unos recursos monetarios de cierto peso que , obviamente , no teniamos , Y aunque el sagaz Eliseo prometió resolver el espinoso asunto , las perspectivas cojeaban .
¿ Cómo obtener los fondos necesarios para subsistir ? ¿ Cómo hacer frente a las innumerables contingencias que , a buen seguro , nos saldrían al paso ? ¿ Trabajar ? También barajamos esta idea . Sin embargo , la necesidad de permanecer a diario junto al rabí de Galilea- practicamente minuto a minuto - relegaba dicha posibilidad a algo utópico y de difícil ejecución.
Autor : J.J.benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
Ciertamente , los responsables de la Operación nos entregaron una suma que respondía a las necesidades de los cuarenta o cuarentay cinco días de que constaba aquel segundo << salto >> en el tiempo . Lo que nadie contempló fue la posibilidad de que estos expedicionarios fueran asaltados y robados .
La cuestión es que , con esta lamentable pérdida , las cosas se habían precipitado . Y nos hallábamos ante otro esquinado conflicto : ¿ Cómo cumplir el resto de la fase << oficial >>?
9.30 horas .
Abstraído por estos pensamientos , pasé de largo ante el primero de los desvíos ; el que conducía a la pequeña aldea de Tir´an . Algunos lugareños , generalmente mujeres con su prole , ofrecían a voces los productos de la tierra . Y forcé la marcha . Aquellos dos kilómetros y medio fueron rematados en algo menos de treinta minutos .
A derecha e izquierda , partidas de felah rompían el dorado y ondeante horizonte , a la espera del secado de las manchas de cebada .La siega , en pleno apogeo , reunía en los campos a decenas de familias que se animaban con monótonos cánticos . Y entre carretas y asnos , una chiquillería alegre e indomable corría sin cesar arriba y abajo , espantando con gritos y palmoteos las tenaces nubes de currucas y tórtolas .
¿ La fase << oficial >> ?
A decir verdad era lo que menos me preocupaba . Mi obsesión en aquellos momentos se centraba en el tercer << salto >> . Aquél sí constituía un gravísimo problema . ¿ Cómo emprender semejante aventura sin un mísero as ?
Eliseo y quien esto escribe ya lo habíamos discutido . Y estábamos de acuerdo : el seguimiento continuado de la vida pública del Maestro - estimada en cuatro años - nos obligaba a contar , entre otros importantes elementos con unos recursos monetarios de cierto peso que , obviamente , no teniamos , Y aunque el sagaz Eliseo prometió resolver el espinoso asunto , las perspectivas cojeaban .
¿ Cómo obtener los fondos necesarios para subsistir ? ¿ Cómo hacer frente a las innumerables contingencias que , a buen seguro , nos saldrían al paso ? ¿ Trabajar ? También barajamos esta idea . Sin embargo , la necesidad de permanecer a diario junto al rabí de Galilea- practicamente minuto a minuto - relegaba dicha posibilidad a algo utópico y de difícil ejecución.
Autor : J.J.benitez
Un abrazo
Antonio Martinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
puede comentar todas las personas que lo deseen , con educación y respeto